Curitiba ha sido la ciudad elegida por la Federación Española de Fútbol para que la Selección resida durante la Copa del Mundo de Brasil. Esta ciudad del sur brasileño es la capital del Estado de Paraná, tiene casi dos millones de habitantes y es ejemplar desde el punto de vista del desarrollo urbanístico, con multitud de zonas verdes y un sistema modélico de transportes.

La Selección quedará concentrada en el Centro de Alto Rendimiento Alfredo Gottardi, propiedad del Club Atletico Paranaense, unas instalaciones modernas que ya escogió la Confederación brasileña en el 2002 para que la ‘canarinha’ preparase el Mundial de Corea del Sur y Japón, que además consiguió ganar.

Esta ciudad deportiva en la que estará la Selección será su segunda casa. Pocos olvidan la localidad austriaca de Neustif o la sudafricana de Pochestroom, lugares que han devenido santuarios y que llegaron a tener su influencia en la consecución del título de Campeón de Europa en el 2008, y del Mundo en el 2010.

Suele comentar el seleccionador nacional, Vicente del Bosque, que cuando estás fuera durante tanto tiempo necesitas estar cómodo. Los jugadores deben sentirse como en casa, en una competición en donde hay momentos de tensión; cuando el equipo regresa después de un partido dramático debe tener la sensación de que vuelve a su casa.

España va a tener que hacer viajes largos durante la Copa del Mundo. En la primera fase debuta el 13 de junio en Salvador de Bahía ante Holanda, hablamos de una distancia de 2.368 kilómetros entre la capital bahiana y la ciudad de concentración de la Selección. La rutina en el Mundial será la de viajar tres días antes de jugar el partido y volver por la noche, una vez disputado el encuentro.

Más cómodos serán para nuestra Selección el segundo y tercer partido, viaje plácido para jugar el segundo envite ante Chile en el mítico estadio de Maracaná; Curitiba está a 800 kilómetros de Rio de Janeiro, por lo tanto el viaje en avión será de solo hora y media.

Pero la suerte acompañó a la Selección en el sorteo, porque el tercer partido que debe jugar España en el Mundial ante Australia se disputará en el Arena Baixada de Curitiba.

El equipo de Vicente del Bosque no deberá viajar para jugar un partido que puede ser transcendental en sus aspiraciones de obtener el pase para disputar los octavos de final del Mundial. De esta forma, nuestros jugadores evitarán el siempre incómodo trámite de viajar en avión, de cambiar de hotel, cambios de temperatura…

Curitiba pasará a ser una ciudad hermanada para los españoles durante la Copa del Mundo; deberemos acostumbrarnos a este nombre, porque durante el Mundial cada vez que los informadores hablemos de nuestra Selección comenzaremos diciendo “Saludos desde Curitiba…”.

© Antonio Muelas, 2014 { [email protected] }