Era el minuto 116 de la Final del Mundial de Sudáfrica. Un país entero se comía las uñas a doble carrillo; un país entero contenía la respiración. Navas avanzaba por el centro, un rechace que caza Iniesta, de tacón para otra vez para Navas, que abre a Torres, que lanza largo hacia el área, rechazan los holandeses, pero el balón cae a Cesc, que lanza un pase maestro al área pequeña hacia Iniesta…
El tiempo se para, Iniesta controla, sólo están Andrés, Stekelenburg, el balón y la historia: Gol de Iniesta y España Campeona del Mundo.
«Es difícil escuchar el silencio, pero yo en ese momento escuché el silencio y sabía que el balón iba dentro». Andrés Iniesta.
Así lo narró Antonio Muelas:
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