Seguramente el encuentro de hoy no será para los de Ancelotti el escollo más duro en la Champions, ni tampoco comportará mucha trascendencia. Aun así, no es difícil disipar motivaciones en la tarde-noche de hoy, sobre todo para un Cristiano Ronaldo que se encuentra muy pero que muy cerquita de igualar a su antecesor con el 7 a la espalda, la leyenda viva madridista más grande de la historia, Raúl González Blanco, en cuanto a goles conseguidos en la máxima competición europea.

A priori, el Real Madrid no debe pasar apuros en el partido de hoy, pero hay que hacer mención especial a varios jugadores del equipo búlgaro muy interesantes.

Su mejor jugador es el mediapunta brasileño Marcelinho; por él pasan casi todas las opciones de este humilde equipo. Al brasileño hay que sumarle al delantero Besiak, que presenta credenciales de buen futbolista, y también el héroe rumano de la previa ante el Steaua de Bucarest, Moti, que consiguió la proeza de clasificar a los búlgaros para la presente edición de la Champions.

Si bien los madridistas pasarán el trámite sin dificultades, no hay que despreciar ni confiarse ante este equipo que, si ir muy lejos, le complicó mucho la vida al Liverpool en su propio estadio.

Jose Rodríguez